Recorrido circular, de 36 km en total y 700 m. de desnivel positivo acumulado aproximadamente.
El recorrido al igual que otros comentados del Garraf lo iniciamos en junto al campo de fútbol de la urbanización y en ligero ascenso seguimos la pista forestal que circula paralela a la carretera dirección Olivella. De nuevo pasamos por el restaurado y recuperado horno de cal.
Horno de cal restaurado
Llegamos a Can Suriol y La Roqua, donde esta vez no cruzaremos bajo el puente sino que ascendemos por el camino hasta alcanzar la carretera asfaltada por donde retornamos unos metros por ella descendiendo de nuevo hacia Mas Milà.
No más allá de 200 metros encontramos a la derecha la pista forestal que se adentra en el bosque paralela a la riera dels Pelagons.
Pista paralela a la riera dels Pelagons
El bosque se espesa y desaparecen los pinos para dejar paso a robles y otros árboles frondosos y que dan frescura y una imagen de bosque mediterráneo.
Superamos una masía y empiezan a aparecer los campos cultivados de viñas, arados y limpios.
Masia
Cabaña de pastor y frondoso bosque
Masia
Seguimos el camino paralelo a la riera, pasamos junto a una
antigua cabaña de pastor, a veces el bosque se queda sin árboles y
otras veces aparece frondoso, siempre bajo la Sierra de La
Llampa que nos queda paralela a nuestra izquierda donde divisamos en su mayor
altura cuevas y zonas de difícil acceso, quizás con escalada.
Cabaña de pastor y frondoso bosque
Sierra de La Llampa
Alcanzamos el cruce de pistas forestales, a la izquierda y en retorno está la pista que que recorre la citada sierra llegar a L'Arboçar; nosotros seguimos rectos hasta alcanzar un segundo cruce que nos hace consultar el GPS ante la duda.
Pasamos por zonas donde el agradable olor de las ginestas floridas se hace patente.
Ginestas floridas
Debemos desviarnos a la derecha puesto que la pista que continua tiene aspecto de llevarnos a Avinyonet y no es este nuestro destino.
La nueva pista que llevamos ahora empieza a coger desnivel en ascenso, hay tramos que se endurecen, pasamos por viñas bien cuidadas y con la última subida, posiblemente la que más desnivel hasta ahora tenga pero sin llegar a ser dura, alcanzamos Can Mitjans.
Cruzamos la urbanización y tras trazar unos metros descendiendo hacia la carretera BV-2411, no llegamos a alcanzarla y nos desviamos a la derecha dirección Fondo Can Malet, donde de nuevo las viñas cultivadas aparecen.
Fondo de Can Malet (Can Mitjans)
Deberíamos ascender por el camino que atraviesa la Sierra de Fitó, pero un cartel y una cinta de los Agentes Rurales impide su acceso por protección de la fauna, entendemos que es por la nidificación de aves.
La opción es seguir el recorrido alternativo rodeando la sierra de Fitó, que con el GPS debemos intuir. El camino es estrecho y sinuoso, más adecuado a excursionistas que no a bikers, algunas veces con rocas y piedras que nos impiden seguir montados y debemos cargar con la bici a nuestras espaldas, y así alcanzamos la carretera BV-2411 que apenas pisarla nos desviamos a la derecha por un camino que va a buscar aquél que hubiésemos tenido que hacer para cruzar la sierra de Fitó.
Al final, después de subir y bajar por el pedregoso camino llegamos al llano donde de nuevo encontramos viñas y donde desemboca en el camino forestal principal que va de Olesa a Can Grau y que circula paralelo a la riera de Begues.
De nuevo viñas, alcanzando el camino forestal de Olesa a Can Grau
El camino va en sentido contrario al cauce de la riera, siempre ascendiendo aunque ahora mismo el desnivel es mínimo, tan solo rampas de corta duración nos exigen esfuerzo.
Dejamos a la derecha el camino que debimos traer para cruzar la sierra de Fitó, también esta entrada aparece cerrada y con el cartel de prohibición.
Y el bosque deja de ser frondoso y húmedo para pasar a ser más seco y con pinos, que actualmente están vaciando para limpieza del mismo. Los pinos son cada vez más escasos según se asciende, ahora sí aparecen rampas de mayor exigencia hasta alcanzar el punto de máxima altura de la Sierra de les Piques donde unos caballos pastorean.
Caballos pastando
Desde este punto las vistas en todas las direcciones es impresionante, al fondo la zona de Vallcarca con el mar de horizonte, la parte derecha con las urbanizaciones de Olivella, más atrás la zona de Can Mitjans y a nuestra izquierda el observatorio forestal contra incendios en el Puig de La Mola.
Disfrutando de las vistas
Según vemos como desciende el camino, por un indicador adivinamos que estará a nuestros pies oculto Can Grau; el camino que vemos a mitad distancia entre nosotros y el mar sabemos que lo deberemos retomar después, es el que nos llevará a Son Siurell, Mas Margalló y els cuatre camins.
Indicador y rebaño de cabras
Nada más iniciar el descenso hacia Can Grau dejamos a nuestra izquierda un rebaño de cabras y una masía en restauración a la cual están habilitando la canalización del agua.
Nos encontramos con una especie de capilla donde tienen una virgen, parece lugar de peregrinación.
Capilla
Bajamos por una rampa de impresionante desnivel, de hecho la han asfaltado con cemento para poder superarla, y enseguida aparecemos por encima del Observatori astronómic de Can Grau para desembocar en la carretera asfaltada junto a la balsa de agua habilitada para emergencias por incendio.
Descendemos por la carretera hasta casi alcanzar Olivella, poco antes nos desviamos a la izquierda por Can Camps para ascender por la pista rural rodeados de flores hasta alcanzar Son Siurell, Mas Margalló y los cuatro caminos o Coll de Llebreta a 239m. de altitud, también conocido como el 'matamachos'.
Flores
En quatre camins descendemos como mucho un kilómetro por la pista que indica dirección Sant Pere de Ribes, al alcanzar la urbanización de Can Pere de La Plana nos debíamos a la derecha buscando el camino rural que se adentra en el bosque y que nos deja de nuevo en nuestro punto inicial de partida.
Mapa del recorrido