El recorrido es casi circular, de 28 km en total y 1.300 m. de desnivel positivo acumulado aprox, tan solo el primer y último tramo coinciden, es la pista forestal que se inicia justo debajo de la deixalleria de Olivella, sita en Mas Milà.
Es una pista con poco y continuo desnivel que va ascendiendo hasta casi alcanzar Olivella.
Pista forestal que asciende a Olivella
Justo pasar el primer cruce de caminos que nos encontramos (en la segunda foto) nos desviamos por el camino de la izquierda, que se inicia con fuertes rampas.
Por el camino van apareciendo restos de hornos antiguos de cal, hondos y redondos, con revestimiento de piedras o mahones donde se cocían las piedras, que por las altas temperaturas del fuego (hasta 1.000º) se volvían cal. Estos hornos fueron utilizados en el siglo pasado hasta los años 60; también encontramos alguna cabaña de pastor construida con piedras y las típicas masías, entre ellas cruzo La Mesquida situada en un alto donde se divisa el camino que asciende hasta Olivella, y desde donde se divisa en el fondo el complejo El pou de la vinya, donde se cultivan viñas en un entorno natural pero muy enfocado al negocio, donde incluso se celebran bodas.
Antiguo horno de cal
Cabaña de pastor
La iglesia de Olivella vista desde el cementerio
Leve descenso y alcanzamos Can Camps, bonita y cuidada masía.
Cabaña de pastor
Masia La Mesquita
Complejo El Pou de la vinya
Superando el cruce que lleva al complejo del Pou de la vinya, el camino asciende, y con un día ventoso como es hoy se hace complicado y sufrido.
Vista desde La Mesquita
Seguimos ascendiendo por el camino, ahora desprovistos de la protección del bosque y por tanto el fuerte viento nos empuja a un lado y a otro, lo único que nos puede proteger en los laterales del camino son los margallons (típica palmera del Garraf) y el florido tomillo.
Margalló i tomillo
Y así, frenados por el viento, alcanzamos la parte superior donde muere el camino en carretera asfaltada que asciende desde Olivella hasta el cementerio; allí seguimos ascendiendo unos metros más a pesar del viento, y enseguida se inicia un descenso por empedrado y complicado camino que nos deja en las calles más altas de Olivella.
La iglesia de Olivella vista desde el cementerio
Entonces nos dirigimos a Can Camps, el camino ahora está cementado pero sigue ascendiendo, un cartel nos avisa que nos adentramos en los límites del Parque natural del Garraf.
Leve descenso y alcanzamos Can Camps, bonita y cuidada masía.
Can Camps
El camino, de seguirlo, nos desembocaría en la carretera asfaltada que va desde Olivella a Can Grau y a La Plana Novella, donde está el Monasterio Budista; pero prefiero llegar por camino rural, así que me desvío a la derecha justo pasar unas viñas muy cuidadas y se inicia de nuevo un ascenso que nos hace llegar hasta Son Siurell y Mas Bargalló, actualmente en reformas.
Viñas, al fondo Son Siurell
Tras un leve descenso iniciamos el último esfuerzo que nos debe llevar al cruce de los cuatro caminos o Coll de Llebreta (239m.), allí se desciende por un camino de mucho desnivel (que después será de ascenso) dirección La Plana Novella.
Cruce cuatro caminos - Coll de Llebreta
En la parte inferior del descenso, abandonamos el camino que recorre junto a la riera de Jafra (y por el cual después retornaremos) y nos adentramos en ascenso por un camino que prohíbe el paso de vehículos motorizados.
Después de las últimas subidas que rodean viñas, alcanzamos el aparcamiento de Jafra, disuasorio de vehículos para excursionistas y donde una autocaravana extranjera permanece estacionada.
El camino ahora es polvoriento por el paso de los vehículos, ya solo un leve ascenso nos permite la visión de La Plana Novella con el Monasterio Budista en su horizonte.
La Plana Novella con el Monasterio Budista en el horizonte
Alcanzamos la urbanización La Plana Novella, e iniciamos el último esfuerzo para alcanzar el Monasterio Budista del Garraf Sakya Tashi Ling.
Monasterio Budista del Garraf Sakya Tashi Ling
Retornamos por el mismo camino hasta el aparcamiento Jafra, pero seguimos recto para rodear el camino por el que antes se ascendió y así evitar retornar por el mismo sitio.
Ahora el camino nos lleva hasta la masía La Fassina, ahora reconvertida para turismo rural, sigue llaneando el camino paralelo a la riera de Jafre rodeada por campos donde florecen las matas de tomillo, donde los abejorros obtienen el néctar y donde una mujer se dedica a recortar con unas tijeras para separar la flor de la rama, me imagino con el fin de utilizar las ramas para fines terapéuticos.
Tomillo
Abejorro en el tomillo
Una vez el llano camino llega al bosque, nos deja en el camino que debe ascender en dura rampa hasta el cruce de los cuatro caminos.
Se inicia el ascenso abandonando de nuevo el bosque y quedando a la intemperie donde el viento a rachas de tanto en tanto se hace presente.
Poco antes de alcanzar el cruce de los cuatro caminos un fuerte golpe de viento me desplaza a la izquierda cortándome el esfuerzo de la subida y teniendo que desistir, pues estaba destinado a caer
por el barranco de la parte izquierda del camino según se asciende.
Retornamos por el camino dirección Olivella y Son Siurell pero enseguida a la izquierda abandonamos el camino y bajamos por uno más estrecho que pasa junto a unas viñas con una cabaña de pastor de piedras al fondo.
Viñas con cabaña al fondo
Y enseguida recuperamos el suave camino que nos ha traido desde Mas Milà, pero esta vez antes de alcanzar la deixalleria nos movemos por un estrecho camino a la derecha, pasamos el campo de tiro, cruzamos la riera de Jafre y ascendemos hasta el campo de fútbol y de nuevo tras 28 km llegamos a nuestro lugar de destino final : Mas Milá.
Mapa del recorrido
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